martes, 4 de marzo de 2014

EL ENIGMA ORTOGRÁFICO




¿Por qué escriben nuestros alumnos mal las palabras a pesar de que les enseñemos reglas que les muestran cuál es la correcta transcripción? ¿Por qué es una realidad creciente en intensidad? Una explicación socorrida puede acudir al lenguaje de los sms o messenger en que se escribe de modo totalmente caótico y descuidado, en base a abreviaturas en las que no importa la correcta escritura. No me convence.


Jean Piaget formuló sus hipótesis sobre la inteligencia formal observando a su hijo en su desarrollo cognitivo. Me pregunto si yo podría hacer algo semejante utilizando a mis hijas como elemento de reflexión ortográfica. ¿Por qué hay unas personas que se adaptan sin dificultad a la normativa ortográfica y no cometen errores? ¿Y por qué hay otras que no pueden salir de la confusión que les lleva a equivocaciones continuas que parecen inexplicables? Hoy una alumna me ha escrito en una redacción: eh hido a classe ha un que llo no tenia demasiadas ganas. ¿Cómo se explica esto? Le he corregido y le he indicado, como a sus compañeros, que escribiera diez veces correctamente los errores cometidos. Es lo único que se me ocurre hacer. Pero me temo que no es suficiente. ¿Cómo es posible semejante confusión? ¿Tiene algo que ver con la memoria visual? ¿Es un asunto genético o en alguna área del cerebro, próxima al área de Broca, hay alguna deficiencia que explica estas dificultades? ¿Tenemos una predisposición para la ortografía igual que la tenemos o no para la música? ¿Puede un adecuado entrenamiento corregir esta predisposición al error ortográfico? ¿Es suficiente la consideración punitiva -de carácter conductista- descontando puntos por los errores ortográficos?


¿Por qué ha perdido relevancia social la ortografía? ¿Por qué hay alumnos que me dirigen correos electrónicos para enviarme algún trabajo y me remiten un mensaje de esta guisa: oy e exo los exercicios xq kiero aprovar.  Yo les intento hacer ver que un correo dirigido a un profesor debe estar correctamente escrito y no lo pueden escribir como se escriben ellos sus mensajes. Esto les sorprende mucho. Que tengan que escribir bien las palabras dirigidas a un profesor de lengua.

Otro factor coadyuvante y no menos preocupante es el nivel ortográfico de los propios profesores de las asignaturas no lingüísticas que no suelen corregir la ortografía a sus alumnos explicando a continuación que no lo hacen porque si lo hicieran, todavía suspenderían más y que no es su función como profesores de tecnología o música.


Por un lado veo esa pérdida de relevancia social de un discurso bien redactado y bien escrito, de acuerdo a unas normas, pero por otro lado veo un enigma nebuloso cuya explicación no alcanzo a ver al ser consciente de la pérdida cada vez mayor de las habilidades ortográficas aunque adoptemos medidas punitivas.


¿Existe una especie de dislexia ortográfica que aflige a una masa cada vez más amplia de la población escolar? ¿Es un problema cerebral? ¿Por qué hay personas muy lectoras y adultas que tienen una ortografía vacilante y confusa, fundamentalmente insegura?


¿Qué claves oculta este enigma ortográfico? ¿Hay alguien que pueda aportar algo aparte de las consideraciones punitivas o lúdicas acerca del tema? No encuentro nada en internet que me dé soporte a explicar esta disfunción de alguna zona del área del lenguaje.  ¿Es realmente un problema neurofisiológico?

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