jueves, 31 de octubre de 2013

Cómo mejorar su calificación en la segunda fase a distancia del Taller de Comunicación Educativa II (primera parte)



1. Etiqueten sus entradas con su nombre propio, comenzando con su primero o único nombre, seguido de su segundo o hasta tercer nombre y sus apellidos paterno y materno. Recuerden que las etiquetas de las entradas respetan absolutamente los caracteres con que escriban su nombre, así sean faltas de ortografía, mayúsculas, minúsculas o cualquier otro elemento que no sea la coma y el espacio que separa a las etiquetas.

Les recomiendo que busquen en la lista de etiquetas, en el margen derecho del blog, la forma en que aparece su nombre, o más aún, si no aparece porque no están etiquetándolo en sus entradas.

Se tomará en cuenta que homologuen la forma en que aparece su nombre en el listado de etiquetas del blog, siguiendo el criterio especificado en el primer párrafo de este primer apartado (nombre(s) más apellidos). Para hacerlo, pueden entrar al modo de edición de sus entradas publicadas (icono de lapicito debajo de cada entrada) y en el recuadro de etiquetas (parte superior derecha del recuadro de edición de la entrada), escribir o reescribir la etiqueta con su nombre (borrando las variaciones incorrectas).

El objetivo es que la etiqueta con su nombre, correctamente escrito, permita que el blog despliegue, al hacer click sobre esa etiqueta, todas las entradas que han publicado y publicarán en adelante.

Explico, para cuando trabajen con sus alumnos con un blog, cuál es el procedimiento y sus ventajas:

Cuando sus alumnos etiquetan con sus nombres las entradas que publican, en la forma correcta y con la ortografía adecuada sin agregar caracteres adicionales (como puntos después del nombre, por ejemplo); el docente podrá hacer click sobre el nombre de cada alumno y de esa forma tendrá la siguiente información (que son criterios de evaluación):

Número de entradas publicadas por cada alumno (el listado de etiquetas proporciona ese dato entre paréntesis después del nombre etiquetado del alumno).

A propósito, un paréntesis. Es reclamo y no reflexión académica, el asunto de una supuesta contradicción entre evaluar por cantidad o por calidad, como si ambas características del trabajo escolar estuvieran contrapuestas.

Estaremos de acuerdo en que lo óptimo es mayor cantidad con mayor calidad y que lo más pobre es menor cantidad con menor calidad. Entre estos extremos se producen una serie de opciones que el maestro debe evaluar: ¿Qué es mejor, menor cantidad con mayor calidad o menor calidad con más cantidad?

El dilema está entre lo cuantitativo y lo cualitativo de la evaluación.

Hablemos mejor de cumplir con objetivos: ¿Con cuántas acciones se cumple un objetivo académico?

El docente en un grupo de estudiantes se encontrará con rifles teledirigidos y con escopetas (disculpen la metáfora en estos tiempos de tanta violencia en Michoacán, en México y en el mundo, pero estoy pensando, por ejemplo, en un cazador de güilotas):

Habrá quien dispare como francotirador y se baje una güilota por tiro, o dos o tres cada cuatro o cinco tiros. Es cuestión de puntería. El menos diestro necesitará una escopeta, y hasta una ametralladora, para tirar al azar y que la ráfaga de tiros dé con uno o más objetivos. Y aún así hay quien dispara hacia el cielo libre de aves volando…

Volviendo al tema que nos compete y para no perdernos en las metáforas: ¿menos entradas bien puestas son mejores que muchas más mal puestas?

Eso depende de otros criterios, “de contenido” sí, pero siempre orientado hacia el logro de objetivos.

Eso será motivo de otra reflexión pero, para empezar, necesitamos, indispensablemente, como se advirtió en la fase directa del curso, que etiquetemos adecuadamente nuestras entradas con nuestro nombre propio.

No es todo, pero es la puerta de entrada. La evaluación cuantitativa no es la más importante, pero es la primordial. De esta forma se evalúa: son pocas o muchas entradas (primer dato) pero, ¿cumplen sus objetivos?

Muchas o pocas. Es otro tema. Hablemos mejor de un promedio y en cuanto a la participación en el blog la experiencia indica que esos promedios están en relación con los grupos. Lo que en un grupo son muchas entradas en otro es el promedio medio y en otro más es la media más baja.

¿De qué depende el índice de participación si el curso es el mismo, el docente es el mismo y la variante independiente son los grupos mismos, las personas que los conforman, ni siquiera las especialidades (porque entre Español o Ciencias Sociales “A” y “B” pueden darse diferencias importantes)?

Tampoco me extraña que un grupo que se manifiesta poco participativo en el curso directo y hasta conflictivo, de repente repunte en la fase a distancia con muy buenas aportaciones individuales.

A manera de hipótesis he pensado que en la fase presencial hay elementos, personas, que inhiben la participación abierta de buena parte de sus compañeros. Determinan el ambiente de aprendizaje aportando elementos que bloquean y hasta violentan las relaciones educativas.

En otras palabras: estudiantes muy brillantes que no se hacen escuchar en el aula, se manifiestan plenamente en su trabajo a distancia, aun con comentarios a la participación de sus compañeros (habrá que considerar que la interrelación comunicativa es selectiva, lo que la propicia, en este supuesto, mientras que en el aula cualquier participación es, necesariamente, compartida a todo el grupo).

Estoy interesado no solamente en que obtengan mejor acreditación en materia de calificaciones sino en que asumamos con plenitud nuestra responsabilidad como docentes en pleno siglo XXI, con tecnologías que están abriendo nuevos escenarios en que debemos estar.

Con un saludo cordial para todos.

LCC Jaime Ramos Méndez
Docente del curso
Administrador del Blog.

Continuará…

sábado, 26 de octubre de 2013

PARA CARLOS MACIEL

       Hola que tal, te paso mi correo:
       
               upn_quique@hotmail.com
      
      Cualquier cosa aquí puedes localizarme, y te mando mi número de celular 4521305846


P.D. El artículo de reflexión "DOS MAESTROS", ¿Dónde lo puedo consultar?

FIN DE CURSO TALLER I


viernes, 25 de octubre de 2013

COMPRENSIÓN LECTORA;)

La comprensión lectora es la capacidad para entender lo que se lee, tanto en referencia al significado de las palabras que forman un texto, como con respecto a la comprensión global del texto mismo.
 
La comprensión es el proceso de elaborar el significado por la vía de aprender las ideas relevantes de un texto y relacionarlas con las popadas y/o conceptos que ya tienen un significado para el lector. Es importante para cada persona. Es el proceso a través del cual el lector "interactúa" con el texto. Sin importar la longitud o brevedad del párrafo.
 
La lectura es un proceso de interacción entre el pensamiento y el lenguaje, el lector necesita reconocer las letras, las palabras, las frases, sin embargo cuando se lee no siempre se logra comprender el mensaje que encierra el texto, es posible incluso que se comprenda de manera equivocada. Como habilidad intelectual, comprender implica captar los significados que otros han transmitido mediante sonidos, imágenes, colores y movimientos.
 
La comprensión lectora es un proceso más complejo que identificar palabras y significados, esta es la diferencia entre lectura y comprensión.
 
 
GUIA PARA EL ANALISIS LITERARIO DE OBRAS III

El ritmo de toda composición lírica se deja sentir en cada estrofa, no en un verso solo, por lo tanto la composición suele estar formada por una serie de estrofas iguales.

Las estrofas se dividen según su rima en asonantadas o aconsonantadas, y riman solo por las vocales de sus últimas sílabas sin tomar en cuenta las letras consonantes; pero siguen siendo más cultas las de rima consonante que riman con todas las letras de su última sílaba.

La medida de los versos de una estrofa determina el tipo de estrofa, parisílabas si todos los versos tienen la misma medida e imparisílaba si la medida de los versos es desigual.

Se utilizan letras para indicar la rima de los versos en las estrofas, siendo mayúsculas para los de arte mayor y minúsculas para los de arte menor. Si las letras coinciden, eso indica que la rima de los versos coincide también, representándose cada rima nueva que aparezca con una letra diferente.
 
Actividad tarea:
Realizar con los poemas del ejercicio anterior, el ejercicio de rima si es asonante o consonante, si es imparisílabo o parisílabo y las rimas diferentes que contiene asignandoles una letra según sea arte mayor o menor.

MEDIDA DE LOS VERSOS

LA MEDIDA DE LOS VERSOS.


Los versos constan de un número de sílabas determinado, pero debes tener en cuenta que las sílabas métricas de un verso no coinciden necesariamente con las sílabas fónicas.

Para contar bien las sílabas métricas de un verso es necesario fijarse en el acento de la última palabra del verso:

·         Si esa palabra es aguda, hay que añadir una sílaba más: "Y en mi camino fatal": 7+1=8.

·         Si es llana, el número de sílabas métricas permanece sin variación: "Pura, encendida rosa": 8.


·         Si es esdrújula, hay que restar una sílaba: "Eso no es corazón...es una máquina"13-1=12.
Hay que tener en cuenta, además, algunos fenómenos métricos que influyen en la medida
de los versos:


·                     La sinalefa. Se produce por la unión, en una sola sílaba, de la vocal final de una palabra y la vocal inicial de la siguiente. (cuan-do-a-vi-ses > cuan-DOA-vi-ses). En métrica, esta fusión es obligatoria.

·                     La diéresis. Consiste en forzar al verso a medir una sílaba más, mediante la conversión de un diptongo en un hiato. (rui-do > ru-i-do).  Es una licencia que las reglas de la métrica permiten al poeta.

·                     La sinéresis. Consiste en forzar al verso a medir una sílaba menos, al reunir dos vocales fuertes (de sílabas distintas) en una sola sílaba. (a-hora > AHO-ra)

Según la medida obtenida, los versos se clasifican en dos clases:

·                     Versos de arte menor: los que miden hasta ocho sílabas.
·                     Versos de arte mayor: de nueve sílabas o más.

Los versos, por su número de sílabas, se reconocen con los siguientes nombres: bisílabo (2), trisílabo (3), tetrasílabo (4), pentasílabo (5), hexasílabo (6), heptasílabo (7), octosílabo (8), eneasílabo (9), decasílabo (10), endecasílabo (11), dodecasílabo (12), alejandrino (14), y, a partir de esta medida, no tienen nombre; sólo su número de sílabas.


  LES DEJÓ  PARA QUE PRACTIQUEN.


REDONDILLAS
Sor Juan Inés de la Cruz
Hombres necios que acusáis
a la mujer sin razón,
sin ver que sois la ocasión
de lo mismo que culpáis:

si con ansia sin igual
solicitáis su desdén,
¿por qué queréis que obren bien
si la incitáis al mal?

Combatís su resistencia
y luego, con gravedad,
decís que fue liviandad
lo que hizo la diligencia.

Parecer quiere el denuedo
de vuestro parecer loco
el niño que pone el coco
y luego le tiene miedo.

Queréis, con presunción necia,
hallar a la que buscáis,
para pretendida, Thais,
y en la posesión, Lucrecia.

SER DOCENTE DEL SIGLO XXI



Para empezar a trazar la figura del docente del siglo XXI tenemos que dejar a un lado el desánimo y pesimismo imperante tomando una actitud animosa y optimista frente a la situación que nos ha tocado vivir. Por el simple hecho de dedicarnos en cuerpo y alma a la educación debemos creer en una posibilidad de cambios. Y no solo digo debemos, es que estamos obligados a ello. Como destaca el propio Miguel Ángel Santos Guerra “hay contextos en los que decir que disfrutas trabajando es poco menos que una herejía. Es incluso una estupidez. En ese ambiente lo que se lleva es despotricar de la tarea, de las autoridades, de los alumnos, de las familias y de la vida misma”. Nosotros no podemos ir por ese camino si realmente queremos transformar la Escuela del siglo XXI.



Tenemos que confiar en nuestra labor silenciosa (y en ocasiones silenciada) porque si no, ¿quién lo va a hacer por nosotros? En educación los cambios y las transformaciones son muy lentos y los resultados son a tan largo plazo que es posible que ni tan siquiera los lleguemos a ver . Para ello debemos empezar por considerarnos a nosotros mismos como nos denomina Javier Urra: “El profesional de la esperanza”, “constructor de presente y futuros, el maestro es un referente, un ejemplo vivo y continuado”, “es fundamental que los padres valoren y transmitan a sus hijos el cariño, respeto y gratitud a los maestros, que estén en continuo contacto con los mismos, que escuchen sus argumentos, que sancionen a sus hijos por su bien cuando el profesor haga saber conductas que lo requieren”. Pero estos cambios y transformaciones solo serán posibles si realmente estamos convencidos de que se pueden conseguir. Es de ese modo cuando dejaremos de hablar de desprestigio de la labor docente y devolveremos a la escuela y sus profesores al lugar que merecen. Por algo en Finlandia, donde la educación es un tema prioritario, están obteniendo unos excelentes resultados en el famoso Informe PISA, ¿crees que allí no se valora la función y el papel del profesorado? 

En el mismo artículo que he mencionado anteriormente, Santos Guerra señala que “hay países donde aquellos que desean ser químicos van a la facultad de química y quienes quieren ser profesores de química al Instituto Pedagógico de Química y allí aprenden química y a ser profesores de química. Y para acceder a los Institutos Pedagógicos es necesario haber alcanzado una puntuación mayor que para entrar en las Facultades. Es decir, la filosofía se muestra con claridad: los mejores, a la enseñanza”.

Debemos seguir el camino marcado por estos países si queremos alcanzar el nivel y la calidad que ellos poseen en educación. Eso no significa que tengamos que copiar lo que hace Finlandia y demás países ya que nuestra realidad cultural, social y educativa es bien distinta. Ojalá fuese tan simple como copiar e imitar lo que se hace allí... Tenemos que buscar nuestro propio modelo. Y es justo por ahí por donde debemos empezar. No podemos perder tiempo, el mañana empieza hoy mismo. Es el futuro de la infancia y de la sociedad lo que está en juego.

Me gustaría terminar esta entrada citando un fragmento del precioso artículo publicado en El País Semanal por Manuel Rivas que lleva por título Amor y odio en las aulas”. Dice así: 

“Mucha gente considera que los maestros de hoy viven como marqueses y que se quejan de vicio, quizás por la idea de que trabajar para el Estado es una especie de bicoca perpetua. Pero si a mí me dan a escoger entre una expedición Al filo de lo imposible y un jardín de infancia, lo tengo claro. Me voy al Everest por el lado más duro y a pelo. Ser enseñante no sólo requiere una cualificación académica. Un buen profesor o maestro tiene que tener el carisma de un presidente del gobierno, lo que ciertamente está a su alcance, la autoridad de un conserje, lo que ya resulta más difícil, y las habilidades combinadas de un psicólogo, un payaso, un dj, un pinche de cocina, un puericultor, un maestro budista y un comandante de la KFOR. Conozco a una profesora de Ciencias Naturales que sólo desarmó a sus alumnos cuando demostró unos inusuales conocimientos futbolísticos, lo que le permitió abordar con entusiasmo la evolución de las especies. Y a un profesor de Matemáticas que consiguió hacerse con la audiencia tras interpretar un rap Public Enemy Number One”.  Y añade, “Todo lo que pasa, y lo que se avecina, no tiende a disminuir la importancia de la escuela sino todo lo contrario. Y la desmoralización del profesorado debería transformarse en una nueva autoestima, en un nuevo orgullo”.

No tiene desperdicio. Ojalá los docentes nos veamos de este modo a nosotros mismos. Lo necesitamos para ir en buena dirección...

En conclusión, ser docente es una forma de vida. Como dice esta extraordinaria cita de Emilio Lledó:

 “Enseñar no solo es una forma de ganarse la vida, es sobre todo, una forma de ganar la vida de los demás”

BIBLIOGRAFIA.

MARTHA I. IANNINI D. CLEMENCIA ROMERO F. (2004) Pedagogía “Arte y Ciencia para Enseñar y Educar” Ed. San Martín y Domínguez, S.C. México, D.F.

PLAN PILOTO PARA COMBATIR EL BULLYING EN LAS ESCUELAS


EL USO DE LAS FICHAS.

Un recurso muy importante para el estudio son las fichas, porque permiten ordenar la información. Son tarjetas de cartulina de distintos tamaños, según el tipo de tarea para la que sean utilizadas.
Hay distintas clases:
·        FICHAS BIBLIOGRÁFICAS DE LIBROS: Miden 12,5 por 7,5 cm. Se utilizan para guardar los datos que identifican un libro. Estos datos figuran generalmente en la portada y en la contraportada, tales como: Nombre del autor, título del libro, nombre de la editorial, lugar de edición y año de publicación.
·        BIBLIOGRAFICA DEL ARTÍCULO DE UNA REVISTA: Los datos del artículo de una revista también están en la portada y en la contraportada, ¿cuáles son? Nombre completo del autor del artículo, título del artículo entre comillas, nombre de la revista subrayado, número de la revista, escrito en números arábigos, fecha de publicación (entre paréntesis) y número de páginas donde está el artículo.
·        FICHAS PARA RECORDAR: Es imposible recordar todo lo que leemos. Para eso están las fichas nemotécnicas, a las que recurrimos para recoger los datos que necesitamos. El tamaño es de 10cm por 15 cm.
·        FICHA DE RESUMEN: Consiste en la elaboración personal de un escrito. En ella se escribe la síntesis de un libro o de un cuento, o el resumen de un fragmento o de un texto que nos interesa. Para esta ficha ubicamos el nombre del autor y del libro o del cuento en la parte superior derecha. Debajo de la síntesis, escribimos los datos del libro.
·        FICHA ERUDITA O DE INVESTIGACION: También llamada ficha de citas o ficha textual, en ella copiamos los fragmentos que nos interesan  de un texto, tal como aparecen en él. A estas copias textuales se les llama “citas”. Se escriben entre comillas porque reproducen las palabras del autor. Usamos puntos suspensivos entre corchetes cuando omitimos partes del texto. En el margen superior derecha escribimos el tema y debajo de la cita, los datos bibliográficos y el número de página.

BIBLIOGRAFIA.
               BARONE LUIS ROBERTO, RODRIGUEZ CARLOS EDUARDO (1999) “Enciclopedia estudiantil de la gramática y la lengua” Ed. Rezza, León Gto. Méx.


10 TIPS PARA PREVENIR EL BULLYING

1. No le pidas a tu hijo que resuelva solo el problema y mucho menos con violencia, porque esto, lejos de solucionar el problema, puede ocasionar más estrés en los niños o adolescentes. Fomenta valores como responsabilidad, solidaridad, entre otros, con tus hijos.
2. Evita que en casa haya gritos, golpes o insultos, recuerda que los niños son un reflejo de los que viven en casa.
3. Enseña a tus hijos a controlar sus emociones e impulsos.
4. Determina límites en su conducta.
5. Relaciónate y conoce a los amigos de tus hijos.
6. Enseña a tu hijo a reconocer sus errores y a pedir disculpas si es necesario. Si comprobaste que tu hijo es un acosador, no ignores la situación porque seguramente se agravará, calmadamente busca la forma de ayudarlo.
7. Cuando se detecta un caso de bullying, los padres del niño o adolescente deben trabajar conjuntamente con la escuela para resolver el problema de una forma inmediata.
8. Habla con los profesores, pídeles ayuda y escucha todas las críticas que te den sobre tu hijo. Mantente informado de cómo la escuela está tratando el caso y los resultados que se están obteniendo.
9. Nunca dejes de demostrarle amor a tu hijo, pero también debes hacerle saber que no permitirás esas conductas agresivas e intimidatorias; además, deja muy claras las medidas que se tomarán a causa de su comportamiento.
10. Si efectivamente comprobaste que lo están acosando, mantén la calma y no demuestres preocupación, el niño tiene que ver en tu rostro determinación y positivismo.

BUSCA TU CAMINAR!!!!


Busca las herramientas necesarias para que encuentres tu propio caminar.

Comienza por disfrutar este nuevo camino de cada uno de tus sentidos, ve lo viable, no te cegues; descrubre la gama de colores que existe en tu propio océano, si observas con claridad verás que no solo resaltan los tonos azules, tambien los hay morados y de distintos verdes; sumérgete a las profundidades y descubre los miles de colores de su propia fauna y flora. Huele los aromas agradables, separa el olor a humedad de los diversos aromas de las sales.
Toca todo lo tocable, atrévete a detener al erizo. Esfuérzate por abrir la concha que se niega, siente las diferentes texturas del sinfin de peces que lo habitan; escucha tu propio ritmo y acóplalo a tus necesidades, desde el tenue reventar de las olas, hasta la más implacable de las tormentas, y si logras escuchar el camino de los vientos, podrás elegir rutas adecuadas. Siente desde tu interior como nunca sentiste, abusa de tus sentidos, y por favor, vive la bella experiencia de tu sensualidad. Enloquece de amor como enloquecieron los marinos ante el cantar de las míticas sirenas.

PROYECTO DE TIC´S 11

PROYECTO DE TIC´S 11

Aquí resulta importante, porque ayudará a precisar el objeto de estudio del presente trabajo de investigación, al analizar los medios didácticos, identificar los siguientes elementos:
El sistema de símbolos (textuales, icónicos, sonoros) que utiliza. En el caso de un vídeo aparecen casi siempre imágenes, voces, música y algunos textos.

El contenido material (software), integrado por los elementos semánticos de los contenidos, su estructuración, los elementos didácticos que se utilizan (introducción con los organizadores previos, subrayado, preguntas, ejercicios de aplicación, resúmenes, etc.), la forma de presentación y el estilo... .. En definitiva: información y propuestas de actividad.

La plataforma tecnológica (hardware) que sirve de soporte y actúa como instrumento de mediación para acceder al material. En el caso de un vídeo el soporte será por ejemplo un casete y el instrumento para acceder al contenido será el magnetoscopio.

El entorno de comunicación con el usuario, que proporciona unos determinados sistemas de mediación en los procesos de enseñanza y aprendizaje (interacción que genera, pragmática que facilita...). Si un medio concreto está inmerso en un entorno de aprendizaje mayor, podrá aumentar su funcionalidad al poder aprovechar algunas de las funcionalidades de dicho entorno. (Pere Marqués: 2011)
La distinción anteriormente expresada permite precisar que el objeto de estudio es un “entorno digital”, pues su propósito es proporcionar un determina sistema de mediación en los procesos de enseñanza y aprendizaje.
En la formación profesional los docentes del siglo XXI  preparan sus clases y elaboran sus materiales de enseñanza directamente en entornos y formatos digitales. La casi omnipresente tecnología basada en Internet, y especialmente de la Web, ha facilitado la distribución directa e inmediata a través de medios como el correo electrónico, servidores departamentales, páginas web personales de profesores o asignaturas, y cada vez más, mediante sistemas y entornos virtuales de apoyo a la docencia y el aprendizaje.
Estos medios de distribución digital han supuesto una mejora evidente en cuanto a la rapidez y eficacia en la transmisión de materiales, si bien no están exentos de limitaciones respecto a las posibilidades de difusión y acceso a los recursos, y plantean dificultades en el almacenamiento, permanencia, preservación y gestión de derechos de los contenidos de enseñanza y aprendizaje.
Los materiales digitales de enseñanza y aprendizaje generados o seleccionados por el docente, en muy pocas ocasiones se difunden a mayor escala que la de cada asignatura o curso, estableciéndose relaciones bilaterales profesor-alumno que no facilitan su reutilización. Los docentes o grupos de docentes son los que mantienen el control exclusivo sobre sus materiales, los almacenan en plataformas de aprendizaje en línea, discos duros personales o colectivos, o servidores web, y en general, ofrecen un acceso restringido y limitado en el tiempo (Davis, 2010, citado en Bueno de la Fuente 2011).
Es digno de destacar que, pese a que aún sigue existiendo docentes que se reúsan o no se resignan  a utilizar TICs en su tarea pedagógica, cada vez son más los que ya han dado el paso y están empezando a producir recursos digitales, aunque en la mayoría de los casos aún hay mucho terreno por recorrer para lograr que dicha producción tenga la calidad pedagógica y tecnológica suficientes.
Casos ilustrativos de lo antes dicho son, por ejemplo, los sitios Web personales de profesores –generalmente producto del esfuerzo personal y desarrollados sobre una base empírica, no sistemática– que a pesar de que muchos de éstos permiten su acceso público, sus páginas no suelen tener una difusión muy amplia, sus direcciones físicas o URL son poco conocidas, y rara vez son enlazadas desde otros sitios Web, por lo que su visibilidad en buscadores es limitada.
Estas Web docentes suelen ser muy inestables, se quedan rápidamente obsoletas, se producen cambios frecuentes en su URL, e incluso se suprimen. En las plataformas de aprendizaje en línea, la permanencia de los materiales también es escasa y poco controlada: los materiales se renuevan o no cada curso académico a decisión del docente, y dependiendo de sus necesidades puntuales en los distintos cursos académicos, o de los cambios en su relación con la asignatura en cuestión (cambios de profesor en una asignatura, e incluso cambio de institución del docente). Para los alumnos, una vez que una asignatura finaliza, se suele terminar su vinculación con la misma, perdiendo el acceso a los contenidos y viendo interrumpida la comunicación y la posibilidad de interacción y autoaprendizaje. (Bueno de la Fuente 2011).

Los docentes están realizando una importante inversión en tiempo y esfuerzo en la creación, mantenimiento y distribución de materiales digitales educativos, sin embargo, en las instituciones educativas no existe aún una práctica generalizada que aborde el almacenamiento, organización, difusión y preservación de los recursos de docencia y aprendizaje digitales producidos por su comunidad académica.

COMPAÑEROS...

Hola a todos, espero se encuentren muy bien, hoy damos por concluido la materia de comunicacion, con este blog muy importante, todos los temas se me hicieron muy interesantes y de gran ayuda para la licenciatura que estamos estudiando.
Espero los archivos enviados les sirvan y les sean de gran utilidad, si en algo les puedo ayudar sobre mi tema, no duden en comunicarse  por este medio.
SUERTE A TODOS. :)

LA EDUCACIÓN EMOCIONAL

LA EDUCACIÓN EMOCIONAL
La sociedad moderna, que ha alcanzado un grado de educación formal sin precedentes, también ha dado lugar a otras formas de ignorancia.
(Jean Claude Micheá)

En este escrito se resalta la importancia de la educación emocional como eje vertebrador de la convivencia. Estrechamente vinculada a la salud mental y a la calidad de vida, la educación emocional emerge como un aspecto imprescindible para afrontar los profundos cambios estructurales y sociales que se producen. Repensar la educación desde estos parámetros es – como señala el Informe Delors – una utopía necesaria.
¿Tenemos que elegir entre “saber” o “sentir”?
Tradicionalmente la escuela se ha centrado en los aspectos cognitivos priorizando los aprendizajes científicos y técnicos, dejando de lado el conocimiento de las personas; no se ha “entretenido” en reflexionar sobre los sentimientos y las emociones. Como contrapunto, las aportaciones científicas actuales destacan la vinculación entre las emociones y el pensamiento como base de toda actividad humana. Por tanto se hace necesario un replanteamiento serio sobre este tema.
El Informe Delors (UNESCO 1998) afirma que la educación emocional es un complemento indispensable en el desarrollo cognitivo y una herramienta fundamental de prevención, ya que muchos problemas tienen su origen en el ámbito emocional.
Este informe fundamenta la educación del siglo XXI en cuatro ejes básicos que denomina los cuatro pilares de la educación: (1) Aprender a conocer y aprender a aprender para aprovechar las posibilidades que ofrece la educación a lo largo de toda la vida, (2) aprender a hacer para capacitar a la persona para afrontar muchas y diversas situaciones, (3) aprender a ser, para obrar con autonomía, juicio y responsabilidad personal, y (4) aprender a convivir, a trabajar en proyectos comunes y a gestionar los conflictos.
En la práctica docente nos lamentamos de la poca motivación de los alumnos y del aumento de los comportamientos disruptivos. Lo atribuimos a la realidad cambiante de la sociedad, a la crisis de valores, a la disgregación del sistema familiar, a la influencia de los medios de comunicación de masas... Para Moreno (1998) muchos de estos problemas serían mayoritariamente consecuencia del escaso conocimiento emocional que poseemos de nosotros mismos y de los que nos rodean, fenómeno al que denomina subdesarrollo afectivo.
Sabemos que gran parte del fracaso escolar de los alumnos no es atribuible a una falta de capacidad intelectual, sino a dificultades asociadas a experiencias emocionalmente negativas que se expresan en comportamientos problemáticos, conflictos interpersonales, etc. Los estudios indican que entre un 10 y un 25 por ciento de los escolares son víctimas o participan en actos de maltrato hacia los compañeros; son
Una programación
Estos aspectos están poco o nada desarrollados en nuestro sistema educativo. Hace falta una intervención sistemática en educación emocional ya desde las etapas de
Educación Infantil y Primaria para prevenir las conductas antisociales posteriores
El proceso que debe seguir un colectivo para aprender a hacer las cosas juntos, respetando la diversidad de sus miembros y aprovechando las potencialidades de cada uno, es largo. No es suficiente con hacer “algunas actividades” de vez en cuando. En este sentido al profesorado nos falta formación y herramientas para afrontar este aspecto con garantía de éxito. Trabajar para mejorar la convivencia como marco en que se apoyen el resto de los aprendizajes debe ser una opción del Centro.
Un programa de educación emocional debe tener como prioridad a los maestros, que en definitiva son quienes tienen que llevarlo a término. Ferran Salmurri (2002) ha realizado un programa de intervención para escuelas de Primaria. Primero sólo trabaja con los maestros, partiendo de las hipótesis que el estado de ánimo de los adultos influye en los alumnos, que nuestro estado de ánimo depende de nosotros y que podemos aprender.
Después son los maestros los que trabajan con los alumnos. Este sistema produce doble beneficio: para el maestro y para los alumnos. Con más recursos emocionales aumenta la tolerancia a la frustración y cuanta más salud mental, más rendimiento escolar.
La educación emocional tiene que formar parte del currículum. Además de la sesión semanal sistemática, tiene que integrarse en la tarea diaria del maestro. Acostumbrarse a preguntar: cómo te sientes, cómo crees que se siente el otro, cómo te sentirías en su lugar, por qué crees que has hecho esto, qué habrías podido hacer en lugar de esto... puede ayudar a entender las motivaciones que están en la base de los conflictos y empezar a resolverlos.
Podemos ubicar las sesiones dentro del área de Lengua, ya que en definitiva se trata de hablar, escuchar, leer y escribir. Y se manejan diferentes tipologías textuales: argumentación, exposición, resumen, diálogo, narración...
Conclusiones
Está demostrado que el cociente de inteligencia medido tradicionalmente ha aumentado en la población general, mientras que el coeficiente emocional disminuye aceleradamente, y con él aumenta la falta de empatía, la intolerancia, la exclusión...
A pesar de la Ley de Calidad del PP, reivindicamos una formación integral que incluya el desarrollo de los aspectos emocionales y de relación interpersonal, porque los aspectos emocionales están íntimamente vinculados con el rendimiento académico y el bienestar personal tanto del alumnado como del profesorado.
BIBLIOGRAFIA
Collell, J., Escudé, C. (2003). L´educació emocional. Traç, Revista dels mestres de la


Garrotxa, any XIX, num. 37, pp. 8-10. (Original en lengua catalana).

MEJORAR LA CONVIVENCIA ESCOLAR A TRAVÉS DE LA FORMACIÓN DEL PROFESORADO

MEJORAR LA CONVIVENCIA ESCOLAR A TRAVÉS DE LA FORMACIÓN DEL PROFESORADO
               
Escrito por María José Díaz-Aguado          
María José Díaz-Aguado
Catedrática de Universidad en Psicología de la Educación.
Directora de la Unidad de Psicología Preventiva.
Facultad de Psicología, U. Complutense, Campus de Somos aguas.
Pozuelo de Alarcón (Madrid)


Resumen

La eficacia en la formación del profesorado en ejercicio mejora si se dan una serie de condiciones como las siguientes: la participación del profesorado tiene carácter voluntario; el programa favorece la cooperación entre los participantes y combina teoría y práctica; la innovación se inserta en el proceso de reflexión continua, y al profesorado se le da el protagonismo que le corresponde.

La escuela debe llevar a cabo una compleja adaptación que obliga a resolver viejos problemas más diversos y visibles hoy, fortaleciendo al profesorado sin sobrevalorar sus posibilidades para desarrollar objetivos muy complejos sin los medios y la formación necesaria.
1. Un modelo de formación del profesorado basado en una continúa interacción de la teoría con la práctica

Las investigaciones y programas anteriormente mencionados (Díaz-Aguado, Dir., 1992; 1996, 2004) reflejan que la eficacia de la formación del profesorado en ejercicio mejora cuando cumple las siguientes condiciones:

Los profesores asumen voluntariamente el compromiso de participar en el programa de formación e innovación educativa, que incluye tanto la participación en las sesiones que componen el curso, como el desarrollo de las innovaciones propuestas dentro de su práctica educativa. Conviene que el cumplimiento de ambos compromisos sea reconocido de alguna forma valorada por los participantes, en la que se especifique el número de créditos que su suma supone.
El programa de formación favorece la cooperación entre los profesores que en él participan, así como entre dichos profesores y otros agentes educativos que actúan como mediadores en el desarrollo y evaluación de las innovaciones propuestas; papel que puede ser desempeñado por expertos de la Universidad junto a profesores del nivel educativo en el que va a desarrollarse el programa que lo hayan aplicado con anterioridad. El mantenimiento de las innovaciones adquiridas se favorece cuando se insertan en proyectos compartidos por equipos dentro del propio centro educativo, y mejor aún por el centro en su totalidad.
El programa de formación combina la teoría con la práctica, distribuyendo el curso en una serie de sesiones dedicadas a reflexionar sobre los objetivos a alcanzar, los obstáculos que suelen existir y las innovaciones que pueden permitir superarlos, y conectando los principios teóricos abstractos con concreciones de procedimientos y actividades que permitan llevarlos a la práctica. La temporalización de dichas sesiones debe llevarse a cabo en un tiempo conocido de antemano y de forma que proporcione la oportunidad de planificar una determinada innovación, aplicarla en la práctica cotidiana y reflexionar sobre los logros y obstáculos de dicha práctica en sucesivas ocasiones. Para lo cual es idónea la distribución del programa a lo largo de un semestre o, mejor aún, durante un curso académico.
La innovación se inserta en un proceso de reflexión continua. Para favorecerlo, además de participar en las sesiones de reflexión compartida, conviene que el profesorado lleve a cabo un diario de campo sobre las innovaciones que pone en práctica, en el que anotar las dificultades y los logros, para llegar a detectar avances que de lo contrario podrían pasar desapercibidos así como conflictos que requieren ser resueltos en sus primeras fases, evitando la tendencia a aplicar las innovaciones de forma automática, que puede conducir a su trivialización.
La formación y las innovaciones sobre las que trata dan al profesorado el protagonismo que le corresponde en la adaptación de la escuela a la nueva situación, poniendo en marcha condiciones viables e incluyendo la posibilidad de que intervenga de forma sistemática en la formación de otros profesores/as, contemplando esta posibilidad en los programas de formación para que después de haberse formado y practicado en una determinada línea pueda participar en la formación de sus compañeros/as, mientras sigue en contacto con las aulas.
2. El punto de vista del profesorado sobre la mejora de la convivencia escolar

Las propuestas que a continuación se presentan fueron elaboradas como síntesis del consenso expresado en un curso de formación del profesorado de secundaria sobre "Convivencia escolar", organizado por el MEC dentro del Plan de Formación del Profesorado, dirigido por María José Díaz-Aguado y desarrollado en julio de 2005 dentro de los cursos de verano de la Universidad Complutense en El Escorial. Participaron 60 profesores/as de secundaria, entre los cuales estaban representadas la mayoría de las áreas curriculares y Comunidades Autónomas, reflexionando durante cinco jornadas a partir de las ponencias presentadas por destacados expertos en el tema de la convivencia escolar y sus problemas. Por eso, las conclusiones que a continuación se incluyen pueden ser consideradas como una muestra del punto de vista del profesorado, en el sentido que suelen interpretarse los resultados de los estudios basados en grupos de discusión-reflexión.

Los problemas que deterioran la convivencia escolar son múltiples y complejos. Y es preciso analizarlos, prevenirlos y solucionarlos en toda su complejidad. Lo cual exige articular la intervención desde los distintos niveles implicados, facilitando la colaboración y el compromiso de todas y cada una de las personas que conviven en la escuela. La máxima "piensa globalmente y actúa localmente" puede ser utilizada como síntesis de la perspectiva que es necesario adoptar, para ajustar desde un esquema realista la complejidad del problema sobre el que se debe intervenir (complejidad que debe ser comprendida en el diseño y articulación de la intervención para que ésta sea eficaz) con las posibilidades de la actuación del profesorado -necesariamente local- en función de las cuales valorar los avances conseguidos.
La mejora de las relaciones personales que se establecen en la escuela debe ser destacada como la base de la convivencia, incluyendo no sólo las relaciones entre alumnos, sino también todas las que afectan directamente al profesorado, con sus alumnos-as, entre profesores/as, con el equipo de Orientación y Dirección, con el resto del personal, con las familias... Porque la calidad de la vida en la escuela depende de la calidad de los vínculos que allí se establecen, y de que proporcionen a cada individuo la oportunidad de sentirse reconocido y aceptado por los demás, y poder responder de la misma forma. Para favorecerlo, hay que incrementar la colaboración y la participación de cada miembro de la comunidad escolar a todos los niveles, incluidas no sólo las normas y la forma de resolver los conflictos (las cuestiones más mencionadas cuando se habla de convivencia) sino también las materias de enseñanza-aprendizaje: ayudando a desarrollar proyectos académicos que fortalezcan tanto al alumnado como al profesorado, y movilizando la energía necesaria para adaptar la escuela a la compleja situación por la que atraviesa hoy.
Es preciso orientar la prevención del maltrato y la violencia de forma que incluya todas las manifestaciones que de dichos problemas pueden producirse en la escuela: por supuesto la violencia entre alumnos, objeto de una gran preocupación social, pero también las relaciones entre profesores y alumnos, desde una doble dirección, así como el resto de las relaciones que allí se establecen. Para llevar a la práctica con coherencia este objetivo es preciso articularlo considerando otros dos objetivos fundamentales que también afectan a la convivencia y que no suelen plantearse habitualmente en los intentos de prevenir el acoso escolar: las relaciones interculturales y la perspectiva de género, promoviendo tanto el respeto a la diferencia como la construcción de la igualdad en torno a unos valores compartidos, basados en el respeto mutuo (como concreción del respeto a los derechos humanos).
Para prevenir la violencia con eficacia es necesario desarrollar alternativas. Para lo cual hay que promover contextos y habilidades de comunicación y de resolución de conflictos, a través del diálogo, la negociación, la mediación, que ayuden a llevar a la práctica de forma cotidiana lo expresado en la conclusión anterior. La lucha contra la exclusión desde la escuela debe ser destacada, en este sentido, como un objetivo prioritario en el desarrollo de alternativas a la violencia, debido a la estrecha relación que existe entre ambos problemas.
La prevención de la violencia exige enseñar a rechazarla en todas sus modalidades, ayudando a superar las frecuentes contradicciones que sobre este tema se producen en el conjunto de la sociedad, que tienen una influencia decisiva en la violencia escolar. Y para conseguirlo, hay que ayudar a descubrir la naturaleza destructiva que tiene la violencia no sólo para la víctima hacia la que se dirige sino también para quien la utiliza y para el sistema social en el que se produce. Conviene tener en cuenta, en este sentido, que el rechazo a la violencia se incorpora de forma mucho más eficaz y profunda si se aplica de forma generalizada y si los adultos encargados de la educación se comportan coherentemente con lo que tratan de enseñar.
Es preciso incrementar la colaboración de la escuela con el resto de la sociedad para que pueda afrontar con eficacia los problemas y retos actuales, incluyendo en este sentido no sólo el establecimiento de nuevos esquemas de colaboración con las familias, sino también la ayuda de agentes especializados en los nuevos y complejos problemas que la escuela debe afrontar hoy (psicólogos/as, policías, mediadores culturales, servicios municipales, ONGs...). Porque si la escuela no está hoy aislada de los problemas que se producen fuera de ella, y se expresan dentro, tampoco debería estar aislada para las soluciones.

En resumen, la escuela debe llevar a cabo una compleja adaptación que obliga a resolver viejos problemas, más complejos y visibles hoy, así como afrontar retos nuevos. Estos ambiciosos objetivos exigen poner a disposición del profesorado medios adecuados para afrontarlos, reconociendo que, de lo contrario, el desfase entre objetivos y medios (tan frecuente en la educación) puede conducir al desánimo y la depresión del profesorado, deteriorando gravemente la materia prima con la que debe trabajar: sus proyectos, sus anhelos, su confianza en la posibilidad de mejorar la educación, que debe renovar cada día. En otras palabras, fortalecer al profesorado supone evitar tanto la tendencia a infravalorar su capacidad para asumir el protagonismo que le corresponde en la nueva situación como la tendencia contraria, la de sobrevalorar las posibilidades del profesorado para desarrollar objetivos muy complejos sin los medios y la formación necesarios.